Organización y comunicación: la base para flujos de trabajo fluidos y mayor seguridad en el quirófano
El quirófano actúa como un cuello de botella, determinando la velocidad, la eficiencia y la calidad de las interfaces adyacentes, como las salas, la sala de recuperación y la unidad de cuidados intensivos. Por lo tanto, la gestión profesional del quirófano y una comunicación fluida son fundamentales para la productividad de todo el hospital. Para garantizar unos procesos óptimos en el quirófano, es esencial que las responsabilidades estén claramente definidas, que se pueda acceder fácilmente a los materiales y la información necesarios y que los siguientes pasos se planifiquen con antelación, de modo que los médicos y el personal puedan centrarse en sus pacientes de la mejor manera posible. Para ello, es importante satisfacer las diferentes necesidades de las distintas partes interesadas.
Alivio y eficiencia gracias a la digitalización y la IA
Los sistemas de gestión basados en IA, como Torin, pueden utilizarse para apoyar la organización quirúrgica, estructurar los flujos de trabajo y mejorar la utilización de los recursos, lo que ayuda a optimizar la planificación quirúrgica diaria y a largo plazo. Torin reduce el trabajo administrativo, lo que deja más tiempo para una atención de alta calidad al paciente. Tanto la planificación a largo plazo como la diaria pueden llevarse a cabo con mayor facilidad y precisión, lo que acorta los tiempos de espera y optimiza la utilización del quirófano. Torin también proporciona datos en tiempo real para la gestión hospitalaria, lo que permite tomar mejores decisiones en todo el hospital. El software de integración Tegris ofrece una plataforma para integrar la visualización de imágenes/vídeos, la presentación de documentos y dispositivos como la mesa de operaciones Corin, conectable en red digitalmente, y las lámparas quirúrgicas. Un quirófano integrado garantiza tiempos de preparación más cortos para los pacientes antes de la cirugía. Esto reduce la carga de trabajo del personal, acorta las estancias hospitalarias y ayuda a prevenir las infecciones nosocomiales, lo que supone claras ventajas tanto para la eficiencia económica como para la seguridad de los pacientes.